jueves, 28 de abril de 2016

La Fase II del Proyecto Eólico de Qollpana Tiene 91 Por Ciento de Avance

El proyecto eólico Qollpana, situado en el municipio de Pocona, tiene un avance del 91 por ciento, según informó la Empresa Nacional de Electricidad (ENDE).

Ayer se realizó una inspección a la zona donde se implementa la Fase II del proyecto, en Pocona de la provincia Carrasco.

La segunda fase del parque eólico contempla el montaje de ocho nuevos aerogeneradores, que incrementarán 24 megawatios (MW) adicionales de potencia al parque generador ya existente. Sumados a los tres MW que actualmente ya se generan, conseguirán incrementar 27 MW de potencia instalada al sistema eléctrico boliviano. 

ENDE informó que la Empresa Eléctrica Corani S.A., responsable de las obras civiles del parque, concluyó hasta enero de este 2016 la ejecución de los trabajos civiles mayores referidos a los aspectos viales, plataformas y fundaciones.

A la fecha se concluyó con el montaje de tres aerogeneradores, y resta montar cinco para la conclusión del proyecto.

El gerente general de Corani S.A., Carlos Rocabado Zannier, explicó que el tiempo previsto para montar cada aerogenerador es de cinco días, “siempre y cuando se cuente con condiciones de viento que lo permitan”. Al margen de ello, la conexión eléctrica interna demora otros cinco días y el comisionado de la unidad cinco días adicionales.

Cada aerogenerador instalado mide 78.3 metros de altura.

domingo, 10 de abril de 2016

“BOLIVIA DEBE CAMBIAR DE MENTALIDAD”

La organización alemana de Servicios de Expertos Seniors (SES), en un convenio con Energética, en Cochabamba, abordarán proyectos de Energías Regenerativas por lo que, durante tres meses, varias universidades serán escenario de charlas sobre energías alternativas y construcción ecológica, mostrando cómo una comunidad de cinco mil habitantes puede tener una pequeña planta.

¿En qué consiste la energía regenerativa?
Son aquellas energías que provienen de recursos naturales que no se agotan a escala humana aunque se utilicen de forma constante. El aprovechamiento de la energía siempre aguanta un cierto impacto en el medio, sin embargo, comparado con los importantes efectos negativos que causan en el entorno las energías convencionales, el impacto de las renovables es bajo. Muchas dependen de la geografía y del clima, de manera que cualquier tipo de energía renovable no se puede instalar en cualquier lugar.

La mayoría provienen del sol de forma directa o indirecta, las que dependen del sol pueden ser transformadas en electricidad por la fotovoltaica, el sol produce irradiación y Bolivia se caracteriza por tener una oferta constante de energía solar, incluso en invierno.

¿Cuál es la característica más importante del uso de estas energías?
La humanidad ha vivido dentro de los ciclos de la naturaleza y recién el siglo pasado la población mundial ha crecido, en el plazo de mi vida se ha triplicado la población mundial y eso ha creado un gran problema, porque cuando estamos usando la energía fósil y eso está llevando a la humanidad a un fin problemático si no logramos cambiar la matriz energética. El planeta se está calentando demasiado y es urgente que retornemos a un equilibrio con la naturaleza y abandonar las energías fósiles.

¿Es posible un cambio de matriz energética en Bolivia?
Sí, es posible pero el gobierno debe cambiar la mentalidad, siempre está pensando en hacer plantas grandes, por ejemplo están haciendo una planta fotovoltaica grande en el departamento del Beni. Entonces debe pensar en realizar plantas pequeñas.

Hacer una planta con 1 kW cuesta unos 20 mil bolivianos y produce 2.000 kW/hora al año, costando el kW/h un boliviano la planta se puede pagarse sola en 10 años. Entonces no es necesario que tengamos plantas grandes de megavatios, por lo que recomendaría que se fomenten a las plantas pequeñas.

¿Cuál sería una solución rápida para fomentar la energía regenerativa?
Una solución sería que en los techos de las casas de las ciudades se puedan hacer techos solares. En una casa se podría instalar alrededor de 100 a 200 metros cuadrados de paneles fotovoltaicos. La potencia instalada sería de 10 a 20 kW, y cada kilowatt produce 2.000 kWh al año de corriente eléctrica. Sin embargo, para ello falta un régimen tarifario para que esa energía pueda entrar a la red eléctrica.