El consultor en energético, Renán Orellana, explicó que de acuerdo a recientes publicaciones sobre el estado de las energías renovables a nivel mundial 2013 de REN21 y tendencias mundiales de la inversión en energías renovables 2013 del Frankfurt School que fueron publicadas en junio del presente año, se observa un incremento considerable de la demanda de energías renovables.
La demanda mundial de energías renovables continuó aumentando durante el año 2011 y 2012, suministrando un 19% del consumo de energía en el 2011, un poco menos de la mitad fue suministrada a través de fuentes de energía de biomasa tradicional.
El especialista explicó también que las inversiones globales en energías renovables en 2012 no lograron superar las del año anterior, disminuyendo un 12% en comparación al 2011.
Esto se debió principalmente a los precios bajos en los sistemas fotovoltaicos y a los mercados debilitados de EEUU y la Unión Europea, según el informe de Frankfurt School-PNUMA/BNEF; sin embargo, con $us 244 mil millones (incluyendo proyectos hidroeléctricos pequeños), el año 2012 alcanzó el segundo nivel más alto en inversiones en energías renovables en la historia.
Asimismo, añadió que se pudo observar una tendencia continua de crecimiento en países en vía de desarrollo, con inversiones que superan $us 112 mil millones, mientras que en los países desarrollados las inversiones totalizaron $us 132 mil millones – un cambio dramático desde el 2007, cuando las economías desarrolladas invirtieron 2,5 veces más en energías renovables (excluyendo grandes proyectos hidroeléctricos) que los países en vía de desarrollo. A la fecha, la brecha se ha cerrado a sólo 18%.
En términos de capacidad para generar energía eléctrica, el año 2012 nuevamente marcó un récord, con 115 GW de energía renovable instalada a nivel mundial, lo que corresponde a un poco más de la mitad del total de la energía adicional neta.
El informe REN 21 2013 del Estado de las Energías Renovables a nivel Mundial (Renewables 2013 Global Status Report) muestra que políticas adecuadas pueden impulsar el éxito en la integración de una mayor proporción de energías renovables en el abanico de las fuentes de energía.
Dos tercios de los 138 países que han introducido objetivos o políticas de energías renovables se encuentran en el mundo en vía de desarrollo.
Asimismo, la distribución geográfica mundial de energías renovables también es cada vez más amplia, particularmente en los países no industrializados, afirmó Orellana.
Bolivia no está exenta a este avance de las energías renovables, en el país, la potencia instalada de sistemas fotovoltaicos domésticos supera los 1.500 kW, la biomasa sostenible también tiene una participación en la matriz energética boliviana con 21 MW de potencia instalada, alrededor del 1% de la electricidad generada en el SIN, y finalmente, la hidroelectricidad como 477 MW instalados, ha cedido en los últimos años al avance de la termoelectricidad.
Capacidad
La capacidad total de las energías renovables a nivel mundial superaron los 1.470 GW en el 2012; es decir un incremento al 8,5% en comparación con el 2011.
La energía eólica representó aproximadamente un 39% de la capacidad energética renovable, seguida por la energía hidroeléctrica y fotovoltaica, las cuales representaron un 26% respectivamente.
La energía fotovoltaica alcanzó el hito de 100 GW, superando la bioenergía y posicionándose como la tercera tecnología renovable más grande en términos de capacidad de operación, después de la energía hidráulica y eólica.
Orellana destacó que las energías renovables están ganando velocidad en Asia, América Latina y el Caribe, el Medio Oriente y África, teniendo nuevas inversiones en todas las tecnologías.
La región del Medio Oriente y África del Norte (MENA) así como Sudáfrica en particular, han sido testigos del lanzamiento de nuevos objetivos ambiciosos en 2012 y el surgimiento de marcos políticos y la expansión de las energías renovables. Los mercados, sectores de producción e inversiones se movieron de manera incremental hacia los países en vía de desarrollo durante el 2012.
Las energías renovables cuentan con una participación de mercado creciente en un número de países cada vez más grande: En China, la generación de energía eólica ha tenido un mayor crecimiento que del carbón, e incluso superó la potencia de producción nuclear por primera vez.
En la Unión Europea, las energías renovables representaron casi un 70% del aumento de la capacidad eléctrica en el 2012, proviniendo en su mayoría de sistemas fotovoltaicos y energía eólica. En el 2011 (datos actuales) las energías renovables abastecieron un 20,6% del consumo de electricidad en la región y un 13,4% del consumo bruto de energía.
La importancia para China y Europa de las inversiones en energías renovables es obvia: representan un 60% de las inversiones mundiales en 2012, a pesar de que fue el año más débil en Europa desde el 2009.
En Alemania, las energías renovables representaron un 22,9% del consumo de electricidad (en el año 2011 era 20,5%), 10,4% del consumo nacional de calefacción y 12,6% del total de la demanda de energía.
En Alemania, las inversiones en energías renovables cayeron un 35% a $us 20 mil millones, principalmente a causa de los gastos menores en la instalación de sistemas fotovoltaicos.
EEUU incrementó su capacidad en términos de energía eólica más que en cualquier otra tecnología, y las energías renovables representaron la mitad de toda la capacidad eléctrica adicionada en el transcurso del año.
Sin embargo, las inversiones bajaron a $us 36 mil millones, sobre todo debido a las incertidumbres con respecto a las políticas estadounidenses.
El Medio Oriente y África mostraron el incremento regional más grande en 2012, aumentando en un 228% a $us 12 mil millones La noticia entre los países industriales que más se destaca es la del Japón, donde las inversiones en energías renovables (excluyendo trabajo de investigación y desarrollo) crecieron en un 73%, subiendo a $us 16 mil millones, gracias al boom en las inversiones realizadas en sistemas fotovoltaicos a pequeña escala, catapultadas por un nuevo sistema de tarifas reguladas de instalación.
Finalmente, Orellana manifestó que Bolivia debería seguir esta tendencia mundial con un marco favorable para estas fuentes de energía, actualmente, la Ley de Electricidad no prevé ningún mecanismo que facilite una mayor inserción de las energías renovables, más bien se tiene una suerte de penalización ya que estas energías no garantizan potencia firme por su carácter intermitente, este aspecto ya fue superado en la legislación de otros países.
Ahora el reto de un cambio en su legislación le corresponde a Bolivia.